jueves, 23 de agosto de 2007

FRANCISCO DE MIRANDA (Una mirada con algunas precisiones a la película de Diego Rísquez)


Por: Suzuky Margarita Gomez Castillo



Luces:
Los filmes nos cuentan historias, nos muestran ciudades, nos hablan de personajes reales o imaginarios. Desde que los hermanos Louis y Auguste Lumiere proyectarón “Salida de los obreros de la fábrica Lumiére” (genero documental), el cine se hizo parte de nuestra cultura visual, episodios “posibles e imposibles, memoriosos o terrribles”, forman parte de este maravilloso arte, donde los cuadros o segmentos cargados de signos esperan ser leidos por los espectadores y cuya interpretación nos invita a interpretarnos a nosotros mismos.
El ejemplo anterior descrito, contribuye a una reflexión que descansa en ofrecer al receptor una mirada sobre el incesante y cambiante imaginario sociocultural y con ello “nuestras formas de significación”. Dentro de los interesados por la Historia y las Ciencias Sociales, existe una tendencia muy amplia en realizar estudios que nos expliquen la importancia del cine y del hecho filmico como dato de un conjunto historiografico, partiendo desde tres puntos interesantes, la teoria, la crítica y la historia[1].
En referencia a la clasificación anterior, la presente recención no pretende realizar un estudio de profundización teorica, sino mas bien una crítica con el próposito de ofrecer una mirada con algunas precisiones a la película Francisco de Miranda, obra artística del director Diego Rísquez, recordado por su versión de “Manuelita Saenz”, la cual nos remonta a un gran éxito en las taquillas de la salas de cine en Venezuela.
Camara:
En este mismo orden y dirección, Miranda como la reconoce el público es un filme que se encuentra dentro del genero drama, y nos proporciona la oportunidad de observar desde la optica de su Director Diego Rísquez y de la pluma de una gran dramaturgo Leonardo Padron, la figura de un venezolano ejemplar el Generalisimo Francisco de Miranda, destacandose en los argumentos una contradicción entre el modo de aparición del heroe en la hsitoriografia y una construcción histrionica que se sustenta en la ficción valida para el septimo arte.
Se observa claramente, que el filme logra involucrar al público desde sus distintas apreciaciones, descubrimos juntos a ciudadanos de todos sectores de la sociedad, algunos atraidos por el elenco seleccionado por la dominación mediática a través del genero dramatico cotidiano, otros buscando una respuesta ante el uso político de uno de los emancipadores mas controversiales de la gesta de la independencia de América, hasta especialistas de diferentes disciplinas acusiosos de la investigación que tratan de dar con aciertos propios de la Colombeia, y juzgan las “criminales ausencias o transformaciones historicas”, que para el juicio oportuno del reconstructor histórico representan la falsificación del hecho fáctico. Esta es Miranda la película, controversial como todo género artistico “no es perfecta ni imperfecta”, sólo es una demostración del septimo arte, integrado por el teatro, la fotografia, la música entre otros géneros.
Acción:
En los marcos de las consideraciones anteriores, Diego Rísquez parte de inscribir la vida del joven Francisco de Miranda a partir de su decisión de embarcarse rumbo a España para servirle al Ejército Real en el año 1771. Muestra el lado humano de este prócer venezolano que lo caracteriza por los constantes vaivenes entre sus grandes momentos históricos y sus múltiples historias de amor. Caracterizando al personaje como un viajero incesante, un idealista, un lector incansable, aventurero de guerras y persecuciones, protagonista de grandes honores y lúgubres cárceles, amante de las artes y la buena vida. Así era Francisco de Miranda, el único hombre que luchó en las tres revoluciones más importantes de su tiempo: la norteamericana, la francesa y la latinoamericana. El venezolano más universal de su época, que ideó la bandera de su país; escribió su primera constitución; nombrado Generalísimo y en sus últimos años conoció la traición
El director representa en su obra cinematográfica la Venezuela de 1770, la Venezuela colonial donde el fuerte economico es la comercialización con el cacao en la que el joven Miranda de apenas 20 años toma como alternativa emigrar. Venezuela era un país que le restaba oportunidades al ser hijo de un comerciante isleño y desde ese momento decide, forjar un sueño de libertad y planificar un continente unido. Cabe agregar, que el hilo conductor de la pelicula nos lleva por una sintesis de vida, hasta que Miranda logra alcanzar los 66 años y es encerrado en La Carraca, toda esta reflejada en 90 minutos, producidos en 10 semanas.
Desde lo anteriores planteamientos se deduce, y atendiendo al discurso artistico que este filme es la muestra de un gran equipo de trabajo, donde encontramos una maravillosa reconstrucción del vestuario de la epoca con sus diferentes matices según el espacio geografico donde se desarrollaban los acontecimientos, una excelente promoción de edificos historicos entre los que se destacan; El Castillo de la Guaira, La Casa Guipuzcoana, El Palacio Federal Legislativo, La Casa Amarilla, entre otras edificaciones históricas locaciones ubicadas en las ciudades de Caracas, Mérida, Coro, Puerto Cabello y Tejerías.
Hecha la observación anterior, tambien destaca el uso una de novedosa técnica de postproducción llamada Chroma, que consiste en filmar a los protagonistas o a los personajes del filme con un fondo verde que luego se reemplaza por el fondo que estéticamente requiere la historia. Otro dato curioso con relacion a las técnicas el uso de recursos literarios como el realismo magico para recrear muchos momentos importantes del personaje, y otros fuerón adoptadas del ballet como la escena de Catalina de Rusia, propia del Cascanueses.
A manera de resumen final, señalamos que esta cinta fue financiada por la empresa privada y estadal. Asimismo, para este cierre recordamos una emotiva escena donde el mismo Rísquez actua representado a Juan Lovera en 1881 pintor de la firma del Acta de Independencia, en este próposito destacan personajes relevantes y de posiciones encontradas, que forman parte del quehacer venezolano, como firmantes del Acta de la Independencia, bajo una petición especial del autor, los participantes fueron; Pedro León Zapata, Alfredo Chacón, Tulio Hernández, Tarek William Saab, Carlos Genatios, Jorge Castillo, Adbel Guerere, Julio César (III) Venegas, Luis Chataing, Bernardo Rotundo, Jaime Armas, Ricardo Sanz, Eduardo Kairez, Román Gutiérrez y Alvice Sacchi. A los cuales se les designo en la producción como “Los Notables”.
Ficha Técnica
Diego Rísquez, Director; Pedro Mezquita, Productor; Leonardo Padrón, Guión; Eduardo Marturet, Música; Liz Mago, Productora Ejecutiva; Hilda de Luca, Directora de Producción; Diego Risquez, Diseño de Producción; Fabiola Hernández, Dirección de Arte; Intensity Gornés y María Adelina Vera, Diseñadoras de Vestuario; Stefano Gramitto, Sonido; Cesary Jaworsky, Director de Fotografía.
Ficha Artística
Luis Fernández (Francisco de Miranda); Leandro Arvelo (Francisco de Miranda - Joven); Mimí Lazo (Francisca A. Rodríguez de Miranda); Jean Carlos Simancas (Don Sebastián de Miranda); Diane de Sousa (Paulina); Flavia Gleske (Susan Livingston); Ruddy Rodríguez (Lady Stanhope); Athina Kliumi (Viuda de Petión); Marlene de Andrade (Marquesa de Custine); Beatriz Valdés (Catalina de Rusia); Anabella Troconis (Sarah Andrews); Miguel Ferrari (Juan Manuel de Cajigal); Luigi Sciamana (Bernardo del Campo); Tuky Jenckel (William Smith); Luke Grande (Conde De Florida Blanca); Antonio Cuevas (Juan Germán Roscio); Aníbal Grumm (De las Casas); Armando Cabrera (John Turnbull); Armando Gota (Cardenal Púrpura); Roland Streuli (Andrés Froberg); Ralf Kinnard (William Pitt); José Gabriel Figueiras (Carlos Soublette); Jimmy Quijano (Simón Bolívar); Antonio Delli (López Méndez); Randy Piñango (Andrés Bello); John Gornés (George Washington); Luis Julio Toro (Joseph Haydn).


[1] Mangieri, Rocco. La ciudad en el filme, Mérida; Ediciones Solar, 8-24 pp.

martes, 21 de agosto de 2007

DESDE EL INFIERNO.

Por: Prof. MINEIDA SUAREZ
Universidad Pedagógica Experiemental Libertador
Pedagógico de Miranda "Jose Manuel Siso Martínez"
Instituto Nacional de Cooperación Eduativa (INCE)


El sueño está tan distante de la realidad, la soledad alimenta mi cuerpo, ya no necesito el oxigeno que los mortales creen necesario para vivir, ya no necesito la luz del sol extraño, solitario e inexplicable. Ya no necesito la fe, ni la esperanza. Desde que padezco en este lugar sólo necesito la magia del olvido, y las formas de lo invisible. De lo sublime del mundo sólo recuerdo la inmensidad del mar y del cielo, supongo que no existe allá arriba algo más que merezca ser recordado.

Llegué a este lugar un mes de enero, no se cuanto tiempo ha pasado desde entonces porque aquí el tiempo es eterno y sólo existen tinieblas, no hay soles que contar. El final de mi paso en la tierra comenzó un invierno muy duro en él que el frío se enterraba en los huesos por lo que las cobijas no servían para protegerse, se que entonces realice un nuevo viaje, me gustaba hacerlo continuamente con la excusa de conocer lugares, lo que en realidad era una excusa para de huir de mi misma, lo que no entendía en aquel entonces era que yo siempre sería mi compañía por lo que independientemente del destino seleccionado siempre el motivo de mi terror me acompañaba. En aquel destino desgraciado me encontré con un demonio superior a mi, un ser sobrenatural con un nombre espantoso que de sólo nombrarlo sacude mis terrores y miedos más profundos, entonces él decidió acompañarme, sin que yo pudiese negarme pues con su poder había embrujado mi mente; fueron muchos días los que viví a su lado, durante los cuales lloré mucho pero no se el motivo, aquel espanto me producía la paz nunca experimentada mientras atormentaba mi mente y torturaba mi cuerpo con maldad y delirios enfermos. Yo saciaba mi sed con las lágrimas de su amargura, yo caminaba en la oscuridad con la luz que producía el fuego de sus ojos, yo le escribía versos con las sangre que el sacaba de mis venas y colocaba en el tintero, aquellas frases tristes me las dictaba la miseria en la que me mantuvo. Cuando se cansó de mi lírica me envió en un tren de regreso a casa, no se cuánto tiempo había transcurrido entre mi ida y mi vuelta, pero debió haber sido mucho, pues encontré mi hogar vacío, mis rosas se habían secado, el ave que con tiernos cantos despertaba mis mañanas había abandonado su jaula, mi madre había muerto seguramente pensando en mi y el gato amarillo que había yo criado después de salvarlo de unos perros salvajes que querían matarle se había mudado a otra casa escapando de mi abandono, se que lo vi una vez después de mi regreso asomado en la ventana de su nueva casa, lo llamé pero solo me infirió una mirada de piedad. Comencé a caminar sin rumbo, a recorrer sin cesar las calles del alcohol, buscando en ellas la salida a tanto dolor, aprendí a fumar y el humo me producía un placer exquisito, pues sabía que por cada varilla que consumía mis pulmones se llenaban de químicos nocivos, que con suerte me llevarían a la muerte en poco tiempo; sin embargo, la vida nunca fue más cínica conmigo ya que cada vez era más sana, los problemas respiratorios que siempre me habían caracterizado desaparecieron y nunca me sentí mejor físicamente.

Me uní a un grupo de amistades a las que siempre encontraba al momento de beber, su compañía era cruda y cruel pero gustaba de ella porque tenía el poder de espantar los espantos de mi soledad. Me entregué por completo a los delirios de la buena música y de la vida alegre hasta el punto de considerarme un ave nocturna, el sexo no me lo permitía, no por no desearlo sino por la mezquindad de no darle nada de mi cuerpo a otros cuerpos y hoy comprendo que en realidad ya no tenía cuerpo porque el demonio lo había destruido en terribles noches de pasión solitaria a mi lado, en terribles noches que yo le pedía para disfrutar de sus torturas y desprecios.

En aquellas condiciones me volví una mujer malvada, sin sentimientos, no me importaba lo que sucedía a mi alrededor, yo que desde niña era de lágrima suelta, que cuando hablaba y me emocionaba lloraba, que cuando me ponía frente a las formas más profundas de la belleza lloraba, me había convertido en una roca, y es que estaba tan distraída, tan hundida en mi, que no notaba lo que sucedía en mi entorno. Quienes me contaban sus cosas jamás notaron que me fastidiaban con sus problemas porque me parecían mezquinos, irreales, absurdos y eran tan ajenos a mi dolor. ¡OH Dios cuantos habrán necesitado una palabra de afecto y se las negué por aferrarme a la vanidad de mis tristezas!

Mucho tiempo duré esperando al demonio, con la esperanza de verle y reclamarle por todo lo que me había hecho perder, por mi madre, por mi casa y por mi gato, que eran las únicas cosas que yo tenía en ese mundo y con las cuales había sido feliz, sin embargo, a veces pienso que mi espera no obedecía al odio sino al amor, al terrible deseo de verle para seguir postrada a sus pies. Así pasaron varios años, pero como no llegó ni dio señales de su regreso opte por resignarme a no verle nunca más y entendí que debía iniciar una nueva vida, lamentablemente el alcohol y la nicotina eran parte de la que ya llevaba y no podía deshacerme de ambos porque al no tenerlos entraba en una crisis terribles que me saturaba las venas de deseos y a la final los volvía a comprar y me entregaba a ellos con la pasión más desenfrenada con la que nunca me entregué a nada en el mundo de los mortales. El poco dinero que percibía como maestra de escuela se convertía en agua entre mis dedos. Siempre respeté a los 34 niños de mi salón nunca llegué bajo los efectos del vicio, siempre fui pulcra y entregada a mi labor, con la esperanza de que ellos serían felices por la paga que merecían de la vida por hacerme feliz a mí algunas horas al día, cuando salía de la escuela nuevamente recorría las calles hasta encontrar lo que fue durante mucho tiempo el motivo de mi vivir.

Una mañana frente al espejo descubrí que me estaba envejeciendo y no porque mi cuerpo presentara síntomas de desgaste, sino porque solos los viejos tienen los achaques y las ideas que yo poseía entonces, me descubrí sola a mi misma, más de lo que sabía estarlo, en la espera del demonio se habían ido mis años y en el aferramiento al recuerdo del pasado no fui capaz de construirme nuevos recuerdos más duraderos y menos tristes. No había sido él quien había destruido mi vida, había sido yo misma mi propio demonio, por que a la final es cierto aquello que los demonios son la expresión de nuestro propio mal, ya era tarde para pensar en un hijo que me acompañara y para soñar alcanzar cosas que ameritaran mucho tiempo, porque el mío ya estaba medido en sílabas métricas exactas y lúgubres.

Una tarde en que el hastío me ahogaba me tomé el contenido de una botella en compañía de unos amigos, al despedirnos crucé una calle, no recuerdo por más esfuerzo mental que hago exactamente lo que sucedió pero un dolor desgarró mi cintura y quedé debajo de dos ruedas gigantes, no tuve ningún pensamiento, no sentí miedo pues supe inmediatamente que me había matado, perdí la noción del tiempo y no se nada más, no se quien me trajo aquí, pero los primeros días fueron difíciles ya que no conocía la forma del lugar y me tropezaba con todo a mi paso. El infierno no es lo que piensan, cuando yo vivía me daban descripciones poéticas de el como que existían enormes llamas y calores insoportables, cuando en realidad en éste lugar no hay sino frío, no existe ni una llama con que calentar un poco el ser.

En una oportunidad hoy la voz de otro infeliz condenado a tanta soledad y miseria me informó que colgando del piso se encontraba una botella de verde de cristal y que en su fondo estaba una llave, que el condenado quien la encontrara salvaría su alma, me dedique entonces a arrastrarme por el piso de las tinieblas con la esperanza de hallarla y ver algún día de nuevo la luz y con suerte el rostro del Dios de quien tanto me habían hablado mis padres, después de mucho buscar supe la ubicación exacta de la botella, pero estaba muy alta para mis ajenos pasos que me seguían sin descanso ni tregua. Escuche entonces una voz de tueno que gritó mi nombre corrí mucho en el infinito desolado y oscuro, encontré unos brazos que me apretaron fuerte, me refugié en ellos, le pedí a su dueño que cuidara de mi mal, rampó entonces sus manos en mi alma y me escondió en su olvido para que no me alcanzará aquella voz que movía el submundo y que según dijo se llamaba recuerdo, esa voz, aquella voz fue más espantosa que la que me llamaba, Quinientas, mil estrellas gritaban en aquella alma callada, su universo pesaba demasiado, era el mismo demonio que me había poseído cuando vivía, me sentí débil como si algo saliera de mi, como si ya no me sintiera ¡Dios busqué sus manos pensando que era un alma en pena como la mía y era el, que tiene por dedos hojillas de oro oxidado!. Sabrá que estuve aquí, verá mi sangre oscura, olerá la nitidez de mi pensamiento ¿Por qué me haz hecho daño? ¿Quieres que me alcance? le pregunté y su voz respondió como un eco desde todas partes ¡quisiera cuidarte!- pero me condenaron a condenarte en este infierno; ¡la botella de verde de cristal se rompió! Nunca más saldrás de este lugar.

Desapareció en la oscuridad y me dejo aquí desangrándome por nuevas heridas, muriendo por segunda vez, exhalando su olor exquisito a azufre. La segunda muerte fue menos intensa que la primera quizás porque ésta ocurre cuando se vive y en ese estado la muerte se idealiza como algo ajeno y distante del propio ser, pero el resto de las muertes ocurren dentro del estado de la inmortalidad cuando ya se ha descifrado el enigma de la atmósfera y de las tristezas.

Adienim Zeráus

















EN UN PEQUEÑO RINCON

Por: Paulo Santos
Universida Pedagógica Experimental Libertador
Instituto Pedagógico de Miranda "José Manuel Siso martínez"
TV Familia- Canal 69 -Caracas- Venezuela



Estando reunido los hombres y mujeres mas importantes del planeta, se le ocurrió a uno de ellos preguntar, ¿cual de los personajes y profesionales, de la tierra, tenían mayor relevancia e importancia, en el acontecer histórico, político social y económico del desarrollo de la humanidad. Saltase pues, de un rincón del salón, un hombre con un aspecto altivo, de mirada vivás y que con paso rápido y seguro, se puso en el medio de los presentes, y llevándose la mano a la frente alegó ¡quien más que un Ingeniero para ocupar dicho puesto!, pues somos nosotros quienes transformamos; el frió en calor y viceversa, remodelamos el relieve, edificamos estructuras, hacemos de lo inhabitable, lo más bello, para que el hombre viva seguro y protegido con los suyos. Es verdad amigo Ingeniero, replicó otro ciudadano, pero déjeme decirle, que sin las leyes y nuestra protección jurídica su profesión se vería sometida a dificultades y problemas, que solo nosotros los abogados, y nuestra gran sabiduría, estamos en capacidad de resolver. En eso se levanta de su asiento una hermosa dama, que vestía encima de sus bellos trajes, una delicada y blanca bata que realzaba aún más su belleza, dirigiéndose a los presentes alegó lo siguiente, antes de tener leyes y sitios para vivir y recrearse debemos tener salud, somos nosotros pues, los Galenos quienes sin duda alguna debemos ocupar el puesto de honor discutido en esta reunión.


Fue así como desfilaron, en aquella calida tarde, hasta que llegó la mañana, una gran cantidad de profesionales, que alegaban y defendían sus carreras, para ponerlas en el puesto de privilegio que se quería llegar en aquella reunión; algunos rayaban en la prepotencia y la arrogancia, así como también un lenguaje cada vez más agresivo y altanero, para tratar de imponer su idea. Sin embargo en un apartado rincón de la sala, se hallaba un humilde hombre, quien en todo el día se había limitado únicamente a oír los alegatos de sus camaradas. Percatándose quien presidía aquella reunión, que aquel ciudadano no había hablado, le preguntaron; y usted que opina de lo expuesto en este recinto, no lo hemos oído discutir, ni interrumpir ninguno de los alegatos, es que acaso no le interesa o no tiene profesión definida. En esto se levanta aquél sencillo hombre y le dice, si he oído de forma pasiva y no he interrumpido a ninguno de mis compañeros, es por que he puesto en práctica lo que yo enseño, esta bien pues díganos que enseña y quien es usted,

Yo sencillamente soy un simple mortal, que trata de sacar de las tinieblas de la ignorancia a todo aquel que puedo, oriento y doy ejemplo de actitud cívica, trato de encaminar a aquellos, a que a mi acuden, en busca de una respuesta a sus inquietudes, trato de dar soluciones a una gran cantidad de problemas que nos ahogan, en fin mi profesión esta orientada hacia el despertar del saber, a buscar el amor en los libros, encontrar la verdad de nuestra razón y ser a la vez ejemplo vivo de actitudes nobles. Yo simplemente soy un Educador. El silencio se hizo presente, callaron las voces que gritaban, los murmullos se fueron apagando, cuando la voz de quien presidía el acto, retumbo como un rayo en aquel silencio sepulcral, y concluyo diciendo, es verdad querido amigo, nos has dado una lección del saber, y tenemos que darte las gracias porque ninguno de nosotros estuviera aquí presente, sino fuera contado con ese maestro que nos enseño a leer, a diferenciar los colores, ha apreciar la belleza. Así como también tuvimos la suerte de contar, con aquellos profesores amigos, que supieron soportar la intolerancia de nuestra adolescencia, encaminándonos y dándonos herramientas, para que en nuestro cerebro, se fuera formando la idea de qué queríamos ser en la vida. Y así pasamos a manos de nuestros amados profesores de la universidad, quienes se esmeraron en construir en nosotros, es ideal de profesionalismo, que hoy, nos trajo hasta aquí, para discutir cual de las profesiones es la más importante. Sin duda alguna, que sin los educadores nadie había tenido ni palabra, ni motivo, para esta reunión, entonces pues, tome usted querido educador el puesto más alto dentro de las profesiones, y que Dios todo poderoso los siga iluminando, para que puedan continuar con su noble labor, pues el futuro de mis hijos, de mis nietos y de las generaciones futuras también esta en sus manos.


Terminase así entonces, esa reunión, y sentando al docente en el sitial de honor se le dio pues su justo y merecido reconocimiento. Mas él con la sencillez que lo caracteriza se limito simplemente a decir gracias, pero no merezco tal alto galardón.

martes, 7 de agosto de 2007

Viaje de mil sabores, risas, ironía y fotografía


Por: Natalia Galvis Catarí


Nuestro viaje a Mérida fue de todos los sabores: amargo, dulce, salado. Quienes fuimos en la travesía nos preocupamos por comer, reirnos y tomar fotografías. Realmente fue un encuentro con la vida, pues habíamos pasado tres meses en otras situaciones que no me voy a nombrar aquí.
Bueno lo primero que nos impresionó es que conocimos unos bomberos en las cercanías de Mucubají que clamaban por un ladrón, pues sí como lo oyen, ellos les hubiese gustado tener el teléfono de un experto en abrir puertas de carros, para rescatar las llaves que Carolina dejó dentro del automóvil, cuando se bajó maravillada a observar a Mucubají, esa imponente laguna en medio del Páramo, con un clima agradable los primeros cinco minutos, porque hay que recordar que nuestra vida transcurre en medio de un desierto que se pone mas caliente a medida que se agrava el problema del calentamiento global.
A lo quince minutos de haber sucedido el problema de las llaves y una vez que el sol se ocultó y vino una gran nube gris con llovizna, los bomberos y el personal de Inparques (Mucubaji forma parte del Parque Nacional Sierra Nevada) procedieron a quebrar el vidrio del carro ya que nos estábamos congelando, sobre todo los dientes de tanto burlarnos. Mientras esto sucedía Pedrito Joel, el hombre que aprendió inglés viendo las series de Sony y yo, hablabamos con un grupo de jóvenes franceses (estudiantes de filosofía y arte) que grababan un documental sobre la situación política de Venezuela, escenario que describimos desde nuestra óptica de telespectadores ya que vemos excesos, oportunismos y efectos mediáticos. Paralelamente, Nadia se bajaba y se montaba de la patrulla de los bomberos porque no soportaba el ventarrón.
Al término de la jornada, nos dirigimos a Mérida, sus calles limpias, el mercado y el trolebús que es una belleza. Me encantaron sus estaciones, similares a las de los supersónicos, plateadas, con cristales, realmente le suma a la ciudad. Ni hablar de las plazas de esta urbe, todas tienen flores y están bien cuidadas, un espectáculo.
A mi no me dejaron ir a Birosca Carioca, un sitio para estudiantes y locos con la mejor música del mundo que es referencia en Mérida desde 1992, cuando fue creado como sucursal de otra igual que está en Petrópolis, Brasil. La gente que me cae bien, le gusta Viroska Carioca, pero como todo no es perfecto a mis pares en esta oportunidad no les apeteció. Por eso mi amiga karina Tamayo me dice que soy una Bohemia incomprendida.
Subimos en el teleférico hasta el pico Bolívar en cuyas cercanías había un poquitico de nieve y lagunas, las cuales son producto, repito, del calentamiento global. Arriba era soportable el frío, cosa que me preocupó.
En muchas oportunidades que había ido a Mérida de estudiante, pues soy egresada de la Universidad de Los Andes, Núcleo Táchira, nunca había visitado los parques temáticos como la Venezuela de Antier y la Montaña de los Sueños, los cuales son una excelente forma de hacer turismo por los caminos del imaginario del venezolano.
En la Montaña de los sueños, un parque cinematográfico, podemos hacer el show de Renny y ver a los artistas nacionales que han pasado por la pantalla del televisor de nuestros abuelos y tíos. Allí observé las maquetas de los cines de Caracas en los años 50, una verdadera belleza.
Están los carros presidenciales y fotografías de los mandatarios venezolanos como Marcos Pérez Jiménez, el hombre fuerte de los 50, el visionario que con su Nuevo Ideal Nacional, dibujó en todas las ciudades del país grandes monumentos al cemento que hoy forman parte de la trama de Barquisimeto, Caracas, San Cristóbal y otras.
Fue allí donde nos tomamos la emblemática fotografía para el periódico El Vigilante, el cual circuló en Mérida en la década mencionada. El titular anuncia que llegaron unos Top Model para un fastuoso desfile y entonces aparecemos nosotros, gordos, con los labios lo mas sensual posible, para retratar hasta la eternidad el espectáculo en honor a la ironía y al derecho que tenemos a burlarnos de las convenciones sociales. En ese instante ridiculizamos a Paris y sus amigas anoréxicas que seguramente no pueden comerse tres pastelitos de trucha aliñada en el Páramo La Culata, allá en la casa de Luz Marina, la bella muchacha con acento andino que declama poemas en medio de las flores moradas con fucsia, un soberano aguacero y el chocolate con canela,
Nos reímos hasta la muerte de los labios de silicón de todas las modelos del mundo en esta sencilla foto y de nuestro peso que sabemos nos merma la salud.
Somos así, nos creemos bellos, belleza, qué será la belleza? En este noema, nos vemos hasta que seamos viejos, fijamos las imágenes en nuestra cabeza, para cuando vengan los malos momentos, saquemos a los buenos y podamos compensar las cuentas en el tablero de las emociones.
Luz Marina nos contó que la filmaron unos estudiantes de cine de la ULA para una película sobre la muerte, no nos supo dar muchos datos sobre esa producción, sin embargo nos llamó la atención que algunos de sus numerosos poemas inéditos serán registrados en esa cinta.
La muerte, cuántas veces nos morimos?, nos morimos muchas veces, pero volvemos a nacer al otro día o a los días de nuestros duros golpes y cuando venimos al mundo están los panas, que en este caso pueden ser nuestros hermanos y tu mamá y tu hermoso cuñado que viene de otra cultura en la cual las emociones se administran dependiendo del tiempo y los impuestos.
Viva Luz Marina y sus pastelitos anónimos no promocionados por ningún medio, viva las ganas de viajar y la disposición a pasarla bien por encima de cualquier rollo y sobre todo viva la cordura de usar las fotografías para algo como este escrito en el que nos metemos con Paris, a quien no envidiamos para nada, porque es tan pobre que lo único que tiene es dinero, tan igual que la pobre Cristi Onasis, no es así Sabina?



Leyenda de la fotografia:
En la gráfica aparecemos Natalia, Nadia, Carolina, Pedro Luis, Pedro Joel Galvis y Tibizay Catarí, nuestra progenitora y nuestro cuñado Troy Bongui a quien cada vez que viene le gusta mas la comida venezolana.

domingo, 5 de agosto de 2007

III Congreso Sudamericano de Historia, Merida-Venezuela, del 19 al 21 de Julio de 2007




Por: Froilan Rodríguez

UPEL- Instituto Pedagógico de Barquisimeto "Luis Beltrán Prieto Figueroa". Lara- Venezuela


Presentación

La Universidad de Los Andes y el Instituto Panamericano de Geografía e Historia (OEA) extienden su muy cordial invitación a todos los historiadores, académicos y a los estudiosos de la realidad sudamericana, a participar en este evento que se celebrará en Mérida, Venezuela. Contar con el aporte de sus conocimientos, significa que unidos podremos recoger el legado de nuestro pasado y contribuir a la conformación de la comunidad académica y de los investigadores sudamericanistas.
El I Congreso Sudamericano de Historia, se llevó a cabo en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) del 20 al 22 de agosto de 2003 y surge por iniciativa y resolución de la XV Reunión de Consulta de Historia del Instituto Panamericano de Geografía e Historia (IPGH) que tuvo lugar en Bogotá, en octubre de 2001. A partir de ese momento el Instituto Panamericano de Geografía e Historia ha sido el impulsor de este evento.
El II Congreso Sudamericano de Historia tuvo lugar en Passo Fundo (Brasil) y su sede fue la Universidad de Passo Fundo, entre el 19 y el 21 de octubre de 2005. En esta ocasión se acordó celebrar el III Congreso Sudamericano de Historia en Mérida (Venezuela) con el patrocinio de la Universidad de Los Andes, Institución de dilatada trayectoria académica. El tercer congreso se propone consolidar el espacio de reflexión e intercambio de experiencias investigativas sobre el proceso histórico sudamericano común y diverso, su pasado, la realidad presente y la perspectiva futura. Con ese propósito, el encuentro internacional que se celebrará en Mérida del 19 al 21 de julio de 2007, ofrece una nueva oportunidad a los estudiosos del proceso histórico sudamericano, con el fin de intercambiar resultados y experiencias de investigación histórica, al igual que estrechar vínculos académicos e interinstitucionales, circunstancia que garantizará el éxito del congreso.

FUENTE: http://www.saber.ula.ve/eventos/congresohistoria/organizacion/index.php

Áreas temáticas:

1. Epistemología y saber histórico
2. Nuevos enfoques de la Historia colonial
3. Historia económica
4. Historia social
5. Historia de la Ciencia y la Tecnología
6. Historia de la Educación
7. Historia de género
8. Historia urbana
9. Historia cultural, intelectual, del arte y de la arquitectura
10.Historia de las ideas, mentalidades, representaciones e imaginario
11.Historia demográfica
12.Geografía histórica
13.Historia política
14.La investigación histórica en Sudamérica, su difusión y contribución en la región
15.Historiografía
16.Historia ambiental.
17. Historia de los procesos integradores sudamericanos.
18. Ciudadanía, Nación y Estado en Sudamérica.
19. Historia de las relaciones internacionales en la región.
20. Aprendizaje de la Historia en los diferentes niveles del sistema educativo
21.Arqueología, Antropología, Etnohistoria y Etnografía.
22. Archivos, Bibliotecas y Centros de Estudios Históricos
23.Historia de la iglesia
24.Historia. Intrahistoria y Literatura
25.Historia y Lengua

sábado, 4 de agosto de 2007

Vivir de Infusiones


















Por: Lic. Natalia Galvis

Barquisimeto- Estado Lara- Venezuela

Para vivir en Magzidia hay que tomar infusiones de cenizas de estrellas que caen todas las noches en la playa cercana a esta ciudad. Ustedes se preguntarán ¿cómo se recogen las cenizas que son plateadas y brillantes? Bueno luego de un proceso muy complicado nuestros delfines y caballitos de mar las toman y las distribuyen en la única cafetería de este lugar que una vez visitó el gran Zeus y se fue bien borracho, por cierto.

En esta urbe estamos altamente preocupados por los colibríes. Hasta ellos toman polvo de estrellas proveniente de la Vía Láctea, ese lugar donde todo es legísimo y diminuto. Por eso nosotros nos sentimos como las estrellas: lejanos a la cotidianidad del siglo XXI, pues vivimos a miles de años luz con toda la paciencia que aprendimos de los orientales, de los budistas y de los practicantes del Tao. En nuestra tierra hay risas, chocolate y nunca nos controlamos la tensión, pues sabemos que la vida pende de un hilo (para que hacernos chequeos médicos) con tantas guerras estúpidas en este planeta tierra, los cambios climáticos y las epidemias como algo que llaman SIDA. A eso le agregamos la indiferencia de la gente que vive fuera de nuestro campo florido. Lo digo porque tienen la capacidad de cenar viendo como masacran injustamente al otro lado del planeta a sus congéneres a través de las llamadas noticias satelitales, en vivo y directo. Mientras se sirve la mesa, frente a las imágenes, lo más que pueden decir estas personas es: ¡pásame la mayonesa!

No importa, no podemos evitar la narcotización de la tele…La ley más segura en magzidia es que si a usted lo visita en demasía la soledad, nuestros delfines le ofrecen un paseo infinito por ese bello mundo submarino que no corta la respiración, no sé bajo qué proceso, no nos preguntemos las cosas más difíciles. Estos enamoradizos mamíferos comen pollo crudo, son plateados y tienen un rostro risueño, una mirada que te trasmite ese lema de que "tranquilo pana, que pronto todo pasará!Se rumora en un paseo que hice por la playa que las infusiones de cenizas de estrellas aumentan la potencia sexual. Lo único malo o desventajoso es que les enrojece las mejillas a sus consumidores, una vez consumado el acto amoroso. ¿Te gustaría venir a este lugar????