jueves, 27 de diciembre de 2007

Carta a Franco



Por: Lic. Jorge Luis Peña Rangel
Caracas- Venezuela

Caracas, 23 de Noviembre de 2007.
Apreciado Franco:

Que la paz de quien acompaña nuestra vidas y administra nuestras acciones, te acompañe, proteja y guíe en todo tu quehacer y que decir en esta época que nos llama a la paz y a la alegría, encarnada en el Niño que se nos dio en un establo de Belén, la ciudad menos importante de los judíos de hace dos mil años.
Tengo 4 meses intentando escribir algo en torno a ese número importante para nosotros, los de la cultura judeo – cristiana, en un primer momento pienso que para mi es importante por las mismas razones bíblicas, los cuarenta años que el pueblo de Israel pasó por el desierto en busca de la tierra prometida, tierra que a lo mejor solo vieron los mas jóvenes y casi niños, porque las expectativas de vida eran las mínimas, a lo mejor esas tierras las vieron fueron los nietos, según algunos biblistas, dentro de esa misma simbología los cuarenta días que Jesús pasó por el desierto y según dice el narrador bíblico, para ser tentado por satanás, pero, también para descubrir su misión mesiánica, pues, es saliendo del desierto que el mensajero de la paz comienza a realizar todo el plan que Dios tenía para él, así hemos conocido “El Drama de Jesús” como lo título un compañero tuyo Jesuita que no recuerdo su nombre.
Sin embargo, para mí, siempre fue mas importante el número 50, por su contenido bíblico también, “La Amnistía” como fruto de uso matemático del siete, el número perfecto se traduce finalmente en cuarenta y nueve y es al año siguiente que se celebraba la amnistía, con todo su significado y significante. Reconciliación, perdón de todos los tipo de deudas y la liberación de quienes se vendieron para poder subsistir en ese valle de lágrimas, pues, no solo se empeñaban ellos, sino que también a los vástagos del fruto del amor en pareja y nuevamente coincidiendo con lo anteriormente mencionado, esa amnistía no era gozada por las personas endeudadas por el mismo problema de la expectativa de vida de ese pueblo.
Aunque, ese no es el tema que me motiva a escribirte, más bien es una “Lection Breve” al estilo de Pedro Trigo con sus tres preguntas para 500 años, esa “Lection Breve” fue de hora y media que se transformo en “Lection Larga” y fue un ladrillo pesado para este neófito que comenzaba a incursionar en el mundo de Sofía y que empezaba a amar a la filosofía.
Mi “Lection no tan breve” la titulé desde hace cuatro meses “Unas vidas para Cuarenta años”, inicialmente se trataba y se trata de darle un reconocimiento a todas aquellas personas que influyeron en mi crecimiento humano y cristiano, entonces de “Lection Breve pasaré a Encíclica Papal”, para darle formalidad a lo que ya está formado en mi mente.

MARÍA ELBA

Ella es mi mamá, la mujer más importante para mí, creo que aún no he aprendido lo mejor de ella, su capacidad para trabajar, amar y vivir la vida. Es persona clave para toda la familia. Ella hace puente a todos sus antepasados y a mis antepresentes. Desde ella tuve contacto con buena parte de los que vivieron a lo largo de todo el siglo XX, sus tíos y los tíos de su mamá.
Con un pasado cuya única gloria se hacía patente en la unidad de la familia. Unidad que aún permanece en las nuevas generaciones, incluyendo la mía que ya no es tan nueva y que además está añejada, pero, que aun le falta para estar en su punto.
Hablar de mi mamá es como hablar también de mi abuela y toda la familia, pues, creo que es toda una institución respetada y respetable ante todas y aquellas personas con las con las cuales ha convivido en su vida diaria, el trabajo, el hogar, la recreación. Mi mamá introyectó lo más genuino del cristianismo primitivo, plasmado en la carta Paulina en el himno al amor, y donde el amor es el más grande de todas las demás virtudes teologales.
Cuando digo que mi mamá es el puente entre el pasado, mi antepresente y el futuro, no es más, sino que por la sencilla razón que, por su alto grado de solidaridad, le permitió y nos permitió a nosotros conocer y reconocer el pasado en vivo y directo, abuelos, tíos, amigos, lo mismo que mi presente, hermanos, padre, sobrinos, primos, haciendo una hermosa cadena de respetos, respetables y gente querida y apreciada por cada uno de nosotros y que forman parten de lo hermoso que cualquier persona puede aprender de la vida a amar y a ser amado.
En mi mamá se conjuga la sabiduría y el amor que se acarician para el encuentro de las nuevas personas que necesitan de nuestra presencia para alcanzar lo que parece difícil e imposible de encontrar, hacer de la esperanza y lo esperado en realidad aunque se tenga que contar los segundos encontrados sobre el paso del tiempo anhelado, es como alcanzar un sueño e iniciar el camino hacia el otro. En una palabra, yo opto por mi mamá, porque optando mi mamá me salvo yo y se salva mi familia y las relaciones afectivas y amorosas con los demás, hablando en términos de Pedro Trigo.
Acto seguido de esto, creo conveniente añadir que lo que soy, lo soy porque ella influyo y mantuvo sus esperanzas en este terreno árido y desértico que soy, para que en lugar de quedar en la nada de lo que consideré una posible miserable vida, me fui, gracias a su esperanza estudiar en fe y Alegría en las lejanías javerianas del Valle en Mérida donde empecé a soñar otras otreidades.

SAN JAVIER DEL VALLE GRANDE

Aunque San Javier no es una persona de carne y hueso pero continua siendo como un aspecto importante por el mundo de relaciones que se tejieron allí en el día a día de mi vida pasada. La Madre María del Monte Mayor, con su real orgullo de ser la una de las descendientes directas de Pinzón que le salvó la vida a Colón cuando grito tierra… según la obra de los Martirios de Colón de Aquiles Nazoa.
Las pocas veces que nos pudo dar clases de religión, pues, la Madre, como buena madre, estaba pendiente de la cantidad de alumnos y alumnas que cuidaba en su vida diaria, inicialmente 70 al año siguiente 150 y los números crecían con el nuevo año escolar hasta ser cuatrocientos con una sola madre y un Padre que aparecía de vez en cuando, pues, su visión futurista lo tenían en el Masparro creando la nueva escuela adaptadas a las realidades locales, la Escuela Agropecuaria San Ignacio del Masparro, en honor al santo Fundador de la orden que nos reunió a todos directa o indirectamente, este inciso, que lo enredó todo, era para decirte que de la Madre Monte, aprendí a ilusionarme por las misiones, pues nos hablaba de sus experiencias misioneras por la India (creo) y del África eso no lo tengo en este momento del todo claro, pero fue ella la primera que me inyecto algo del ímpetu misionero de Francisco Javier.
A propósito de esto, el otro Francisco Javier, actualmente forma parte de las filas ignacianas, me adentro y me enseñó a distinguir entre vida religiosa y clero secular, eso no lo tenía tan claro, lo empecé a tener claro cuando estudiaba 2 año y Francisco estaba en 5º grado.

FERNANDO BILBAO PEREA S.J.

Es el hombre que más toleró, creo que debió haber sido una práctica ascética, el temerme como acompañante por todas partes, pues fui su sombra, ja,ja,ja… Si no fue santo por su conversión y vivir una ancianidad con dignidad, pues, fui yo quien lo ayudó a santificarse, pues, viéndolo bien fui una ladilla humana, ante todas sus actividades. De él aprendí eso, a ser tolerante, a encaminar mi vida por los mejores senderos del cristianismo, a ver a Jesús en cualquiera de sus dimensiones con la ternura de quien se encuentra débil en el pesebre.
Ciertamente que esa acción mía se podría maquillar un poco como que fui la persona que estuvo pendiente de él en todo aquello que los demás compañeros de orden de él no podían estar por sus ocupaciones y lo digo sin jactancia. Eso me ayudó a descubrir mi vocación de amor a todo lo que se llama vida, como un aspecto heredado en mi ambiente familiar, pues todos fuimos educados bajo ese ejemplo de vida, en el ámbito de la solidaridad y el respeto por todo lo que signifique vida.
Bilbao fue un hombre de fronteras, entendió su vocación cristiana hasta el último momento, se consagró a Dios y por obediencia después de sus largos 50 y muchos años de vida emeritense, se vino a vivir y morir dignamente en el colegio San Ignacio… De el aprendí eso creo, a ser observador, lo que no he aprendido es a ser callado y sosegado a la hora de hacer y decir las cosas, a lo mejor si lo pusiera en práctica ahorraría energías que las necesito para otras cosas.
De este entono tuve el privilegio de compartir la vida contigo y muchos de tus compañeros de quienes he aprendido que basta con aceptar lo que son los demás y a poner un punto de amor para todas aquellas ocasiones en las que lo único que bastaría es eso para no comernos los unos con los otros y eliminar el termino latino “hominis lupus hominae” no recuerdo si se escribe así, pero lo que si en el español imperfecto salido de mí se diría “el hombre es el depredador del hombre, esto por si acaso tu latín no interpreta el mío.
En este sentido en el ambiente jesuítico hay otro, aunque con menos intensidad marcaron mi vida, como tus compañeros César, Ramón Aúz, Juan de Madariaga, Epifanio Labrador, todos ellos fueron pieza clave dentro de la vida de último mencionado, Fernnado Bilbao, pero los más importantes y que hicieron mella en mí, fueron Fernando Bilbao y José María Vélaz, que cuando lograba alcanzarme me decía con su imponente voz “ya dejaste de hablar como una mariquita, como una niñita, que si das una orden primero se reirán de ti y después si acaso te harán caso”, de algún modo esa es una realidad que no se escapa del todo de mí, pues, si cuando doy una orden primero se han reído de mí y después la cumplen y eso que no tengo una voz de mariquita, que tal si la tuviera… A veces pienso que realmente la vida es un carnaval y que yo ando disfrazado, sin embargo es la fortaleza interna la que hace que no decline ante nada ni ante nadie…
De esta vida Javieriana, tuve un encuentro muy importante están los Ejercicios Espirituales, donde los inicie al estilo de los curas por exigencias del colegio en rotundo silencio y soledad, ah bendita soledad que me acompaña continuamente, a veces me hace tanta falta, como los días colegiales de San Javier, el emérito padre Santos, después en tercer año nos acompañaron los Claretianos, a través de la figura del P. José Antonio Santana, cuya vida y cercanía me llamaron la atención…

JOSÉ ANTONIO SANTANA CMF

Sí yo no me hubiese encaprichado con lo jesuítico, hacerme Jesuita sin contar si ustedes me querían en sus filas, a lo mejor hubiese terminado como clérigo Diosesano, como un Hermano de San Juan de Dios o un Hermano de la Salle, los incursioné a ellos también, a lo mejor me hubiese hecho Claretiano antes de tiempo, pues en San Santana, encontré algo de lo que había en casa, un ser humano que cuya vida y ejemplo, siempre me motivaron, a encontrarme a mí mismo a hacer de mi vida y mi humanidad un lugar para el hogar de todos pues muy en principio ellos me ofrecieron lo que en casa tenía, un hogar, el calor de la ternura y sentido de la espiritualidad que es capaz de proteger a cualquier vida.
Años después, cuando ya me había determinado por continuar la medicina, después que de haber estudiado para Auxiliar de Enfermería, pues, se cambió el rumbo gracias a Nubia, la familiar de una paciente que tuve en el Piso 4 del HULA, y me reencontré con mi deseo anterior de retornar a lo religioso.
Fue entonces, cuando empecé a frecuentar lo religioso de nuevo, ya para este momento había muerto Bilbao y ya no existía ni un ápices de melancolía ni de guayabo por lo jesuítico, ya era otro el camino, después de haber incursionado por carmelitano, de haber estado en Lobatera y Michelena, ya había pasado por mi trabajo de voluntario en el Internado Judicial de Mérida y había pasado por la pastoral con la C.V.X en la loma de los ranchos en Chama y en por la catequesis en Campo de Oro…
Estaba ya todo dispuesto para otros mundos, estaba medio fogueado para enfrentar ahora la vida Religiosa ya no desde las gradas, sino, en pleno rodeo, agarré el toro por cachos que no era tan fácil como yo lo había pensado…
Con Santana y el grupo de Claretianos, crecí como hombre, como ser humano, como cristiano pero aún no he logrado encontrarme conmigo mismo, todo se pierde en muchas partes y pareciera que cada vez me pierdo más en el mundanal ruido y mayor ruido es que yo mismo me hago y no dejo paz y tranquilidad para poderme entregar a los demás en términos antropológicos para el crecimiento personal y espiritual de todos. La lección última de él fue a que me atreviera a soñar para poder ver después los sueños hechos realidad, gracias por tu compañía en mi formación académica y religiosa.

SUZUKI GÓMEZ

Es una mujer con temple, en ella encuentro al ser humano capaz de alcanzar las metas y objetivos con toda precisión. Es la mujer que ha aprendido de todas las cosas que le ha tocado vivir. A sus cuarenta años es ya abuela de de un bebé de más de un año. Luchó contra viento y marea por sus estudios y, estoy seguro que se siente realizada con lo que hace, vive las etapas de la vida con intensidad, cariño, ternura, alegría y optimismo. Espero aprender de ella eso, a que los logros como fruto de la lucha son más sabrosos y nos hacen más dignos. Ella me invitó a inventar, a escribir y a sistematizar los conocimientos, de no haber sido por ella, pos a lo mejor nunca lo hubiese hecho.


MARO PLAZA Y JULIA ARANDA

Hermanos de vida y misión, son ellos un espejo de lo que además de lo antes mencionado, de lo que deseo ser, un ser humano cercano y pendiente de lo acontece en todo lo que se llama vida. Los dos ex religiosos, igual que yo, están danzando por esta vida, decidieron aventurarse a la vida en un país extraño, como el Padre Abraham, para hacer de sus vidas algo mejor y darles al fruto de su amor (Kairos y Marcos) una vida más plena y mejor, éxitos en ese mundo de Dios y la tierra de la Guadalupana.

BLAS MARQUEZ CMF

Misionero Claretiano, hombre de temple y sabiduría, fue mi segundo formador en la vida religiosa. De el aprendía a medio escribir y a seguir leyendo a la vida con ternura y amor, creo que fue una pieza clave en mi formación humana y, en mi iniciación como escritor, espero aprender de él, lo mismo que de los demás hermanos Claretianos a ver la vida con alegría y a como decía él a “a salvar la buena intención” aunque los frutos a veces sean malos.

MARÍA AUXILIADORA PACHECO LUGO

Mujer de temple, cuando éramos apenas un par de soñadores y que nuestras respectivas madres pensaron que seríamos el uno para el otro, pues, solo estábamos realizando nuestros sueño de llevarle la felicidad a los internos del Internado Judicial de Mérida que quedaba e Glorias Patrias, muy cerca de nuestras respectivas casas, allí nos aventuramos a acompaña a los internos en su desarrollo personal, académico y además de entregarle a sus hijos durante todos los domingo del año, un espacio para la recreación, el entretenimiento y la humanización de un lugar tan inhumano como lo era ese…
Mary y yo, nos dedicamos mucho tiempo para crecer y para mostrar lo mejor de nosotros para los demás, nos conocimos después de la Pascua Juvenil celebrada en la casa de Retiro Espiritual de San Javier del Valle Grande, donde cada fin de semana nos encontrábamos en su puerta pero yo nunca la recordaba, lo que le ocasionó inicialmente una especie de rabia hacia mí, pero con el tiempo nos aprendimos a querer y a estar pendiente de mí, desde estas tierras a las que vives San Cristóbal, te deseo éxito y prosperidad en todo lo emprendas con tu familia, la de tus entrañas.

SOR MARÍA DOLI

Religiosa Dominica Venezolana, dedicada a la enfermería y al trabajo de Voluntarios del Internado Judicial de Mérida, es una mujer que como compañera de trabajo en el campo de la enfermería, sin quererlo o queriéndolo me dio las herramientas necesarias para atender todo un área de enfermería, como lo fue el piso 4 del HULA, donde aprendí lo mejor del ejercicio de la enfermería, es allí donde me desarrollo como trabajador y empecé a proyectarme como ser útil para los demás desde esta noble profesión.

MI FAMILIA

Son más de 40, a mis hermanos, padre, tíos, primos… de ellos, lo mejor he aprendido, en los cuales tengo un perenne hogar en sus corazones, ellos me rescataron de lo que pude haber sido y no soy, a Isabel, con la que más peleé pues su ternura, su bondad y nobleza me enseñaron a estar para todos, a Gisela con su fortaleza e ímpetu para alcanzar lo que otros con más salud no lograrían y Leo, hijo leal y noble, ellos les digo que he aprendido a ser hermano de esta humanidad, que he aprendido a ser hijo de ella y que nunca me sentiré sólo aunque solo en apariencia lo esté, pues los llevo en mi corazón y con me basta y, no tenerlos físicamente y realmente que no estén…

RAFAEL CARÍAS S.J

De el Aprendía a ver el conocimiento a partir de la cotidianidad, que la metafísica y la epistemología están inserta en todo este ecosistema llamado vida, parecía ser un hombre intrascendente, pero, no era así. Solo nos enseñaba a ver a la filosofía con un amplia sabor a vida a amor, en esta vida donde todo se pretende desde lo meramente académico y visto desde una simple óptica profesional, pues lo mejor del conocimiento y la metafísica, esté en esta cotidianidad y en esta metavida.

JOSÉ RIZALEZ

De estoy aprendiendo a ser organizado, a tener algo de paciencia y a ver la vida con algo de esperanza. Pero, no siempre se es lo que se espera de forma inmediata, solo espero tener una cosmovisión de la vida mas completa para poder entender todo lo que ella implica. Sin embargo, sé que la vida para que sea vida tienes que estar vestida de verde por que representa de esperanza y fe.



CARLOS MENDEZ

Se podría decir varias cosas, creo que la mejor es que tiene ahínco y fuerzas para vivir la vida con alegría y espontaneidad, es la razón por la que veo de mi vida un caos total, pues a ciencia cierta estoy perdido en todo este desorden que se llama mi vida, creo que estoy medio encontrándome en este camino mío, que desearía que fuera para que todos se encuentren en esta vida que espero que sea de todos…

Y a de ti que podría decir: Gracias por la única persona que me escucha y me entiende en todas mi dimensiones, pues, entiendes al Jorge con todo tipo de inquietudes, entiendes mi espíritu, mi mente y, todo lo que representa mi vida… Mil gracias por escucharme siempre y a veces con eso basta… Amigos siempre.
A JORGE PEÑA

Diría de él, que no lo entiendo, que aunque no esté conforme con nada de lo que hace y piensa, quisiera decirle que aprenda de todos aquellos que ha mencionado anteriormente que lo cultives en tu corazón, sé lo que le gustaría realmente, que no le tema a los caminos ni a los senderos. Que no deje a Jesús, ni a su Dios, que realmente todos los caminos conducen a Roma… Pero les digo a todos que aunque considere que mi vida a sido un real desperdicio, espero rescatarla y hacerla servir para algo. Por eso elegí pasarla a solas conmigo mismo en esta navidad, para ver si logro entender en medio de esta soledad que no me es atorrante, que para que demonios podría servir esta vida mía… Disculpen el tono con respecto a mí mismo, pero lo que tengo vida en mayor o menor medida se los debo a ustedes y quizás por eso tenga sentido intentar empezar a soñar de nuevo. A todos Feliz Navidad y un venturoso 2008.


Jorge Peña